El diputado alfa Reynaldo Carballo compartió otra conmovedora historia de una mujer trabajadora a quien ayudó a hacer su suelo emprendedor realidad; se trata de la señora Ligia, ella vende comida en bolsa por todos los pasillos del mercado Central.
Su sueño siempre fue emprender su negocio fijo y propio, por lo que el diputado le ayudó a través del donativo de una nueva planchita; ahora, esta será su nueva y adecuada herramienta de trabajo, con la cual podrá seguir echándole ganas a la vida y sacando su comida a diario para generar ingresos y mantenerse.
Historias cómo estas suceden todo el tiempo pero no siempre se cuenta con la ayuda de seres nobles y bondadosos cómo lo es el diputado alfa; por lo que su ayuda y contribución sin duda alguna conmueve y lleba de mucha alegría al saber que sí hay diputados que verdaderamente sirven al pueblo.